GRACIAS

    Escribo esto con un nudo en la garganta aún por la emoción. He comido, poco, porque el nudo no me dejaba comer más, y aquí estoy para dedicaros unas palabras, que creo que os debo.

    Para defenderme de mi "no discurso" de hace unas horas, os diré lo que decían los antiguos: "VERBA VOLANT, SCRIPTA MANENT". Venga, ya os traduzco yo (no os esforcéis que estamos de vacaciones); viene a decir que "las palabras vuelan, lo escrito queda o permanece". Básicamente, es lo que quiero, que lo que os voy a decir permanezca siempre en cada uno de vosotros.Claro que, lo escrito tiene también sus inconvenientes; nunca podré negar que lo que aquí digo no lo dije, e incluso podría ser utilizado en mi contra en cualquier momento, o dentro de unos meses podré arrepentirme de alguna cursilería que aquí escriba. ¡Oh, no! ¡Será el fin de mi fama de "bruja mala"! Aún así, me arriesgaré y lo diré. Es bien simple, pero no por ello os lo digo con menos sentimiento: MIL GRACIAS.

    Gracias, en primer lugar, por el detalle que habéis tenido hoy con las flores y con vuestras palabras. Por cierto, he creído escuchar algo sobre mi libretita de anotaciones...En fin, prosigo. Dice un refrán castellano que "de bien nacidos es ser agradecidos" y vosotros lo confirmáis. Es bonito comprobar que valoráis el esfuerzo que hemos hecho juntos para que esa ilusión inicial se convirtiera en realidad. 

    Gracias también, y esto ya lo he dicho otras veces, por vuestra implicación en todo esto y por vuestro sentido de la responsabilidad. Sí, es verdad que hoy cierta señorita (no voy a decir nombres) nos ha tenido con el alma en un puño porque no aparecía, y ahí no ha sido muy responsable. Pero cierto es que un error lo tiene cualquiera. Además, necesitábamos algo de emoción, algún obstáculo que vencer hoy, que parecía que todo iba sobre ruedas, o simplemente alguna anécdota que recordar, je. Sin embargo, pese a esos pequeños descuidos, no podéis negar que el grupo ha estado unido e implicado en todo lo que iba ocurriendo: cambiando el formato de un power point, buscando manoletinas del 41, un deshabillé, los cachivaches del afeitado, lámparas, cómo hacer los traslados, si se iba a entender la palabra "espectro" o no,... Buff, si es que nos hemos planteado cantidad de cosas y nos han surgido cantidad de inconvenientes que hemos resuelto juntos. Eso es importantísimo y muy, muy gratificante para Carmen y para mí, que confiábamos en vosotros ciegamente y sabíamos que este año la obra salía. Las dos lo supimos desde el principio, desde el mes de octubre, y lo comentábamos; Carmen, con una sonrisa de felicidad que crecía y crecía después de cada hora de alternativa; yo, también con sonrisa de felicidad y sintiéndome muy orgullosa de estar ahí con vosotros y con Carmen en un proyecto conjunto, pero he de confesar que también con algo de vértigo, pues mi sentido de la responsabilidad no me deja que las cosas salgan mal, ya que si salen, tienen que salir bien y si no, no salen. De ahí lo de la libretita de notas; apuntar lo que sale mal o lo que falta, para corregir, mejorar,... Sí, os exigíamos e insistíamos en la vocalización (en esto seguiremos insistiendo, ya os aviso, aunque va muchísimo mejor), el dinamismo, la rapidez entre acto y acto, el ¡¡volumen!!, la complicidad con el público,... Pero, como veis, todo ha merecido la pena. Es bueno que os exijamos y que os exijáis a vosotros mismos para mejorar cada día, y esto lo podéis aplicar a cualquier ámbito de la vida (se me ocurre que algunos lo podríais aplicar a los estudios, por poner un ejemplo, je). Personalmente, creo que os he exigido y me he exigido a mí misma y el fruto de tanta exigencia, lo hemos disfrutado hoy, por cuarta vez, y ha sido gracias a vosotros.

    "Mae" mía, lo que me gusta escribir, ¿eh? Ya acabo, solo un pequeño comentario más. No sé si sois conscientes pero hemos montado una obra de teatro con poquísimo dinero. Quizás unos 50 euros. Verdad es que hemos tenido la tremenda suerte de que nos han prestado los micrófonos, bueno, se los han prestado a nuestra relaciones públicas, pero lo hubiéramos hecho igualmente. Quiero decir que el dinero no es lo más importante, que ayuda, sí, pero que habéis sido capaces de hacer reír y sonreír a mucha gente partiendo de muy poco dinero. Y la recompensa personal después de estos meses, la mía al menos y espero que también  la vuestra, no hay dinero que la iguale.

    Gracias por los sentimientos que habéis provocado en mí. Espero que esto supla las palabras que no os he podido decir antes. Y ahora me voy al sofá, a reposar tanta emoción.  

    Con todo mi cariño,

                Esther

                                                 Vuestras flores en mi salón :) ¡Son preciosas!